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La naranja

Como consumidor es posible que creas que todas las naranjas son iguales. Pero esto no es cierto.
Según el tamaño, el color de la pulpa, la época de maduración, la forma, si tienen o no semillas o pepitas, o por sus diferentes sabores, estaremos ante un tipo de naranja u otra.
Por supuesto que en su aroma y su sabor intervienen muchos factores. Entre otros el terreno en que han sido cultivados, la climatología y también los cuidados de los agricultores.
Podemos decir que existen 3 principales tipos de naranjas: las navel u ombligudas, las lisas, también conocidas como blancas, y las sanguinas.

1. Naranjas tipología Navel:

Navel en inglés significa ‘ombligo’, y este dato ya nos da una pista de la característica principal de este grupo de variedades: tienen uno de los extremos rematado por una especie de cierre en forma de ombligo. Las navel, además, suelen ser naranjas grandes, de piel de tacto rugoso y grosor considerable.
Respecto a la pulpa, presentan unos gajos grandes y generosos en jugo, pero también en fibra insoluble, es decir carnosas, lo que las hace más aptas para naranja de mesa que para hacer zumos. También presentan la ventaja para este fin de que casi nunca tienen las incómodas pepitas que nos encontramos en otras variedades al morder.
La naranja tipo Navel es de las más conocidas y su consumo empezó a principios del siglo XIX. Es una fruta de maduración temprana. Muy fácil de pelar y con un sabor muy dulce, por eso es tan apreciada y por eso también es la que más indicada está para los más pequeños de la casa.

2. Naranjas tipología Blancas
Entramos en las llamadas naranjas blancas aunque también se las conoce con el nombre de Valencias. A diferencia de las Navel, las blancas no tienen ese ombligo característico. También se diferencia porque tiene algo menos de acidez que otros grupos de esta fruta de temporada. Su sabor también es muy dulce.

3. Naranjas tipología Sanguinas
Son naranjas también muy conocidas. El origen de estas naranjas se encuentra en China. Como su propio nombre indica este grupo se caracteriza porque su pulpa presenta un color rojo muy intenso parecido al color de la sangre.

Esto es consecuencia a que presenta en su interior una gran cantidad de sustancias llamadas antocianos. Estos pigmentos incluso pueden afectar a la corteza. Lo que está claro es que tienen un color muy llamativo y su estética es bastante diferente de las anteriores familias de naranjas.

Y por último, es posible que te estés haciendo esta pregunta: ¿hay alguna diferencia entre naranjas de zumo y de mesa?
Las naranjas de mesa son las mejores para consumirlas enteras. Pero lo cierto es que en cuanto a sabor no vas a notar diferencia. Se denominan de mesa porque tienen un aspecto más estético y mayor tamaño. Se comercializan habitualmente porque su piel no presenta ninguna imperfección y, por lo que son más agradables para la vista.
Las naranjas de menor tamaño o que presentan alguna imperfección en su piel se utilizan para hacer zumo. La diferencia de precio que puedes encontrar en muchas tiendas sólo se debe a su aspecto. No a su sabor. Dicho esto, no tengas ningún problema en hacer zumo con las naranjas consideradas de mesa.

La mandarina

La mandarina, al igual que la naranja, presenta también una rica y diversa variedad de clases que se agrupan esencialmente en tres grupos: en primer lugar, las mandarinas llamadas “Clementinas”; en segundo lugar, las denominadas “Satsuma”; en tercer lugar “Híbridos de mandarino”, además se suele denominar como un “cuarto grupo” las mandarinas consideradas comunes.
Si quieres conocer más acerca de las variedades de las mandarinas, te invitamos a que navegues por nuestra tienda on line en su correspondiente apartado.